Humanos y mascotas cada vez nos comunicamos mejor, existe sustento científico que señala que los perros han adaptado sus cerebros para percibir nuestro mundo de una forma más cercana haciendo que por ejemplo entiendan nuestras emociones siendo capaces de comunicarse con fluidez. La comunicación con los perros ha mejorado de manera recíproca, tanto ellos como nosotros hemos evolucionado fortificando la relación que según los científicos consigue un proceso mejorado de la información social ya sea el entendimiento de voces, ladridos y más factores del entorno.
El cerebro de los perros y el de los humanos se parece ciertamente, por eso podemos dar fe que la comunicación con los perros goza de mayor fluidez que con otros animales, nos comprendemos y con el pasar de los años esta buena interpretación mejora gracias a mecanismos cerebrales parecidos según el entorno social.
La comunicación vocal entre humanos y perros es un éxito sin dudas. Ambas especies nos compenetramos perfectamente pues compartimos desde hace más de 18.000 y 32.000 años un entorno ambiental que lleva a nuestras mentes a desarrollarse en paralelo.
Durante los años perros y humanos han aprendido juntos, por eso existen ciertas claves de comunicación básicas como lo encontramos en la risa humana, el llanto de los bebés o el dolor o llanto expresado en los ladridos del can.
Es innegable que los perros son unos maestros para descifrar nuestras emociones, parece que estuvieran en este mundo para ser más que unos compañeros de vida, tal vez son la muestra fiel de la relación que busca perfección, un ejemplo para que como humanos busquemos esa elocuencia de sentimientos y entendamos incluso cuando otros nos hablan fuerte.