Al tener una mascota debemos preocuparnos también de su salud bucal, acosumbralos desde pequeños a que se laven los dientes y a utilizar productos especiales para canes. Existe una gran variedad de productos que suelen ser esenciales para su cuidado y salud como pastas dentales, huesos de cuero y palitos de cuidado dental. 
Nuestras mascotas llegan a ser parte de la familia y por eso debemos brindarle todos los cuidados necesarios para su salud. Debemos ofrecerles una alimentación balanceada, visitas frecuentes al veterinario y poner mayor énfasis en lo que se refiere a su higiene.
Una de las cosas que a veces se pasan de largo son los dientes de nuestros perros, y ellos al igual que los humanos necesitan un cuidado habitual en su dentadura para prevenir el sarro y algunos problemas derivados como la gingivitis o el mal aliento.
Lo mejor es acostumbrar a nuestra mascota desde que es un cachorro, a cepillarse los dientes y para poder hacerlo efectivo, existen unos cepillos dentales que se colocan dentro del dedo como si fuera dedal y nos hace mucho más sencillo la tarea de poder limpiarlos.
Es necesario también limpiar los dientes utilizando una pasta dental pero esta debe ser especial para perros, ya que la que usamos los humanos puede resultarles tóxica.
Dentro de los muchos productos que pueden contribuir con la higiene tenemos el llamado Virbac, un líquido que se pone en el agua y ayuda a eliminar el sarro, dejándole con un buen aliento. Como premio le podemos dar los Greenies que contienen clorofila y los ayudan a eliminar el sarro, proporcionándoles buen aliento.
Hemos visto en el mercado los huesos de cuero, aquellos que sirven para entretener a la mascota, y que de paso ayudan en su higiene bucal.
Finalmente se encuentran los palitos llamados Advance Dental Care Stick, estos pueden darse a diario y ayudan a regular la formación de sarro.
Si tenemos perros de razas pequeñas debemos tener mayor cuidado a la hora que mudan los dientes, sobre todo los colmillos, ya que el sarro tiende a acumularse entre ambos colmillo. Otro problema es que los dientes de leche no suelen caerse a la edad que deberían, y el nuevo diente crece detrás y no es fácil darse cuenta que tiene dos dientes en el mismo lugar.
Por eso las visitas al especialista deben ser recurrentes antes de que el perro cumpla un año de edad, para que le haga las revisiones convenientes y recomiende los mejores productos para su aseo e higiene.
