El mayor problema que generan los gatos en casa, son los zarpazos que da con sus uñas, malogrando muebles y hasta lastimando a sus dueños. Por eso lo mejor es recortarle las uñas cada cierto tiempo, teniendo cuidado hasta donde cortar para no lastimarlo y generar que nunca más quiera dejarse cortar. Los mininos son lindos animales y las mascotas preferidas por la mayoría de mujeres que deciden vivir solas. Los gatos son cariñosos, independientes y muy inteligentes, capaces de darse cuenta de nuestros sentimientos y de percibir nuestro estado de ánimo.
Cuando tenemos uno desde que es pequeño debemos brindarle muchos cuidados, alimentarlo de la mejor manera, bañarlo de vez en cuando para que se vaya acostumbrando y lo haga parte de su rutina, jugar con él y sobre todo enseñarle a no ser tan destructor ni arañar los muebles o las cosas que podamos tener en el hogar.
Casi siempre son las uñas del gato las que generan muchos problemas ya que rasgan los sofás, jalan y arañan las cortinas, malogran los muebles de madera cada vez que les provoca dar un zarpazo y hasta pueden arañar a sus dueños y otras personas que llegan de visita.
Por eso debemos tener presente la opción de recortarle las uñas a nuestra mascota para evitar incidentes. Lo mejor es acostumbrarlo desde que es un bebé para que lo sienta como algo normal al igual que el baño y se deje cortar sin resistirse o lastimar.
Los mejor para recortarle las uñas, es adquirir un cortaúñas especifico y sentar al minino sobre las piernas, asegurándolo en el hueco que queda entre el brazo que no usaremos tanto y una de las partes laterales del estomago.
Al tenerlo en posición y dándonos la espalda, será más complicado que arañe o que se suelte haciendo algún movimiento brusco.
Es importante saber exactamente hasta donde debemos cortar para no lastimarlo. Se coge firme pero muy suave su pata y observamos bien la uña donde encontraremos una parte rosada y otra más blanca en la punta.
La parte de color rosa es la raíz y por ningún motivo debe ser cortada ya que si se corta sangrara mucho y el dolor que sentirá impedirá que haya una próxima vez para recortar sus uñas.
Si creemos que no podemos hacerlos solo, debemos pedir ayuda a alguien más para que nos ayude a sostenerlo. Luego debemos ser firmes al cortar, pero si no estamos seguros, entonces solo cortemos las puntas de cada uña.
Esto significará recortar las uñas más seguido, pero no lastimaras al animal.
Las uñas de las patas traseras no son necesario cortarlas porque no son muy filosas, ni crecen demasiado rápido. Muchas veces ni siquiera se recortan.