Los gatos suelen padecer de infecciones oculares como conjuntivitis, ojos rosados o glaucoma, y el tratamiento que se les sugiere es a base de pomadas oculares, pero lo difícil es aplicarles la pomada. Lo mejor es contar con el apoyo de otra persona para poder sujetarlo y colocarle la medicina en el lugar correcto evitando que el remedio toque el ojo o las pálpebras. 
Los gatos son muy susceptibles de padecer infecciones oculares como la conjuntivitis, ojos rosados o glaucoma, y luego de ser revisados por el veterinario, es muy común que el tratamiento que este recomiende, sean las pomadas oculares para aplicarse cada cierto tiempo.
Puede que suene sencillo pero aplicar algún medicamento en los ojos del gato, es una tarea bastante complicada debido al comportamiento salvaje y muy rebelde de estos felinos.Así conozcamos bien a nuestra mascota y este sea el gato más dócil y calmado, hará de todo para impedir que se le aplique el remedio de forma sencilla.
Lo mejor es mantener a la mascota parada e inmóvil aunque sea muy difícil lograrlo. Si sabemos que nuestro gato es nervioso, lo más adecuado es enrollarlo en una toalla dejando solo la cara para afuera. Estando sujeto de esta manera, se evitara que el animal se mueva y rasque en exceso pudiendo dañarse y hacer daño a sus amos.
Lo mejor es que haya otra persona para que ayude a facilitar esta situación y ayude a coger al gato, o si no para que sea el quien le pueda colocar la pomada, mientras se le sujeta. Con la mano izquierda se sujeta la cabeza con firmeza, cogiendo la parte superior de la misma, utilizando los huesos de la cara para prender firmemente, sin hacerle daño.
Utilizando el dedo pulgar de la mano izquierda, estiramos la pálpebra inferior hacia abajo creando algo como un bolso. Con la mano derecha se aplica la pomada a algunos milímetros de los ojos, pero evitando que el medicamento toque el ojo o las pálpebras.
Se coloca una línea fina de la pomada en el bolso del ojo, se cierra el ojo y se fricciona suavemente la pomada haciendo que se distribuya de manera uniforme. En caso sea necesario, se debe repetir el proceso con el otro ojo.
Es bueno acudir con el especialista luego de haber terminado con los días indicados para el tratamiento, ya que a veces, pueden necesitar de otras dosis, o cambiarse el medicamento si le ha producido alguna reacción alérgica, o cuando no se ve una cura definitiva.
