Cuando se vive solo y se quiere tener una mascota, se debe primero pensar en la personalidad y del estilo de vida de la persona. Quienes son muy activos necesitan de un acompañante con las mismas características; y quien se considere tranquilo y relajado, va a preferir una mascota muy parecida a él. 
Muchas personas que viven solas piensan seriamente en la opción de tener una mascota como compañía, pero el simple hecho de querer un animal cerca puede llevarnos a cometer un error, ya que las mascotas necesitan de tiempo, atención y muchos otros cuidados.
Casi siempre se tiene como primera alternativa un perro, pero no es el único animal que existe. Los perros pueden ser perfectos para quienes tienen espacio, tiempo libre y dedicación. Los perros necesitan salir a pasear, deben ser alimentados de 2 a 3 veces diarias y necesitan también de baños cada dos semanas.
Aparte deben ser entrenados para que aprendan reglas de comportamiento, como saber donde hacer sus necesidades, o no maltratar los muebles.
Definitivamente con un can, las responsabilidades aumentan y de todas maneras tendría que ser parte de tu rutina y ritmo de vida.
Por otro lado, quienes viven solos pasan la mayor parte del tiempo fuera trabajando, y el perro no es un animal que pueda quedarse solo muchas horas, en este caso lo más conveniente es pensar en un animal más independiente como los gatos.
Los mininos son perfectos para todos los que viven en lugares sin mucho espacio, o para quienes viajan constantemente. Son muy sociables, afectuosos y demasiado independientes pudiendo quedarse solos en casa y muy tranquilos cuando no estés presente.
Lo que si se necesita es su rincón con una caja de arena para que pueda hacer sus necesidades, y deben ser alimentados dos veces al día.
Se recomienda invertir dinero adquiriendo ciertos accesorios como juguetes y arañadores para evitar que dañe los muebles, ya que ellos necesitan afilar sus uñas y muchas veces los hacen en los lugares menos indicados.
En caso no se desee que el gato o gata tenga crías, se puede optar por la castración o esterilización, con estos métodos también se evitan peleas entre animales.
En realidad, todo va a depender mucho de la personalidad y del estilo de vida de la persona, ya que quienes son muy activos necesitan de un acompañante con las mismas características; y quien se considere tranquilo y relajado, va a preferir una mascota muy parecida a él.
