El virus de la inmunodeficiencia felina tiene un comportamiento similar al SIDA. Los gatos que padecen esta grave enfermedad no tendrán una vida larga pero con algunos cuidados puedes procurar que vivan dignamente. 
Si descubres que tu gato padece el virus de la inmunodeficiencia felina lo primero será evitar que conviva con otros felinos puesto que se transmite solamente entre gatos ya sea mediante la saliva o la sangre.
Los gatos enfermos no pueden contagiar a los humanos, por eso podrás realizar tu vida con normalidad, los cuidados deben reflejarse sobre el felino que pudo ser contagiado por otros gatos peleando, lamiéndose o al heredar el virus de su madre.
La mascota debe permanecer en el interior de la casa, no permitas que el gato salga pues si se cruza es seguro que los cachorros nazcan con el virus de la inmunodeficiencia. La esperanza de vida de los felinos mejora con cuidados y tratamientos destinados a fortalecer sus defensas.
Procura cubrir todas las necesidades del gato para que tenga calidad de vida. Dale su propio espacio, su cama personal, una caja de arena y no le niegues ni los juguetes. Esté o no enfermo el gato necesita de mucha dedicación en cuanto a tiempo, mimos y cuidados para su salud. Consulta con un buen veterinario sobre el tratamiento más adecuado para tu gato.
