Sabemos que la pis y la deposición de los gatos es muy fuerte y defícil de eliminar, por eso hay que mantener muy limpio el lugar donde se ubica el arenero, debe limpiarse la caja con frecuencia y cambiar la arena en su totalidad cuando el olor no se elimina con nada. 
Las mascotas necesitan de muchos cuidados para que se mantengan saludables y felices. Si bien cada animal es distinto, puede decirse que muchas de sus necesidades coinciden como la calidad y cantidad de alimento que deben recibir, un tiempo para divertirse y distraerse, la higiene de ellos de su cama y de sus accesorios, y el mucho afecto que se les debe ofrecer para que se sientan queridos y muy cómodos.
Y hablando de higiene, sabemos que no debe faltarles un buen baño cada cierto tiempo y que en la temporada de verano debe hacerse con más frecuencia. Si no puede realizarse esta actividad en casa, entonces se le puede llevar a una clínica veterinaria o a una tienda de mascotas que ofrezca este tipo de servicio.
Lo mismo debe hacerse con todo lo que le pertenece, ya sean sus mantas, sus prendas de vestir en caso que las use, el lugar en donde está colocada su cama, la propia cama y hasta sus juguetes.
Y tampoco debe olvidarse su caja o arenero, ya que contar con una arena de alta calidad no es suficiente ya que el pis y la deposición del gato tienen un olor muy fuerte y difícil de eliminar, pero teniendo como ayuda algunos consejos, se puede terminar con los problemas.
Para comenzar hay que buscarle al arenero un lugar adecuado, es decir debe ubicarse en una zona ventilada. No resulta una buena idea que se coloque en el mismo lugar o cerca de donde duerme, come o juega. Pero en caso no haya mucho espacio para ofrecerle y todas sus cosas están juntas, lo mejor es que se coloque todo cerca de una ventana y mantenerla abierta durante el día con una rejilla y cerrarla por las noches.
Además de la zona, hay que tener la arena muy limpia, de lo contrario se tendrá arena por toda la casa. Es recomendable tener una pala con rejilla que se utilice solo para retirar y recoger la arena sucia; incluso puede tirarse al inodoro para evitar que haya mal olor en tacho de la basura.
Si bien en ocasiones puede retirarse solo la arena que está sucia, resulta conveniente cambiarla en su totalidad de vez en cuando. Esto ocurre cuando a pesar de haber quitado toda la suciedad de la arena, el olor sigue presente. Hay que tener en cuenta que el cambio total va a depender de la cantidad de gatos que se tengan y del tipo de arena que se use, ya que existen de varias clases distintas.
La caja o el arenero también deben limpiarse con regularidad. A pesar que los gatos son extremadamente limpios y muy independiente, van a necesitar de la ayuda de sus amos para que su lugar quede perfectamente aseado. Pero, no hay que olvidar que los mininos son animales con un olfato muy sensible, por lo que resulta mejor evitar productos demasiado fuertes como la lejía. Puede utilizarse también algún ambientador suave que se encuentra con facilidad en cualquier tienda y en variedad de olores.
