Muchas personas eligen el veterinario sencillamente teniendo en cuenta su cercanía, pero como dueño responsable tendrías que elegir con más cuidado puesto que estas poniendo la vida de tu mascota enteramente en sus manos esperando traten bien sus enfermedades o accidentes. Lo primero sería buscar referencias o preguntar a tus conocidos sobre los veterinarios que han visto a sus mascotas. Ellos te pueden indicar con sinceridad si les pareció bien uno u otro veterinario. Las experiencias de otros son la mejor referencia.
Visita el centro veterinario y ten en cuenta la impresión que te da, la primera a veces acierta. Observa por ejemplo como funciona, habla con las personas que atienden y observa el estado de las mascotas entre otras cosas.
El comportamiento de los buenos veterinarios es a veces notable, por eso fíjate como habla, como se mueve, como sujeta a tu mascota, si lo tranquiliza, si es cariñoso. Los diagnósticos rápidos y la poca atención hacia la mascota dan mucho que pensar.
Se dice que los animales conoces a las personas y reaccionan dependiendo de eso, así que mira como lo hace tu mascota, si le gusta el veterinario o al contrario reacciona con miedo u alterado. Es mejor eligir al veterinario que logra una adecuada reacción de la mascota.