Muchas veces cuando se quiere tener una mascota no se sabe que es lo mejor, si comprar un animal o adoptarlo. Los especialistas recomiendan la adopción ya que es un acto más humano y solidario que implica hacerse responsable de un animal abandonado, ofreciendole una segunda oportunidad. Para tener una mascota lo primero que se debe hacer es estar seguro si se quiere comprar o adoptar al animal. No importa de qué animal se trate puede ser un perro, un gato, un conejo o una serpiente, la cosa es que tener una mascota implica responsabilidades y cuidados de parte del dueño hacia el animal, que muchos no están dispuestos a cumplir.
Ante la gran duda de comprar o adoptar, muchos especialistas recomiendan que lo mejor es la adopción ya que se convierte en todo un compromiso de velar por el bienestar de un ser por toda su vida.
Cuando se compra un perro o gato, siempre se ve la ventaja de poder tener una mascota de raza o pedigree deseado, y en algunos casos esta práctica no es otra cosa que una crueldad encerrada ya que para muchos criadores resulta ser un negocio redondo.
Primero se adquiere una hembra y al tener crías estas se comercializan, cuando son aptas, y si nacen con algún problema físico son sacrificadas ya que nadie quiere encargarse de un animal con defectos. Después la hembra vuelve a quedar preñada haciendo de esto un ciclo de explotación económica.
También se ha visto que al comprar un animal, no es otra cosa que por moda. Son los gatos de raza como los siameses, los persas, y en perros los más solicitados son el Labrador, el Schnauzer, el Yokshire Terrier y el rotwailler, las razas más cotizadas para tener una mascota de moda. Cuando se tiene un animal en estas condiciones, muchas veces no se tiene la consciencia suficiente de lo que significa hacerse responsable de ella.
Tener un animalito en casa es una gran responsabilidad, un compromiso que debe ponerse antes de muchas razones materiales o estéticas. Hasta con las mascotas exóticas sucede lo mismo. Las aves tropicales, las iguanas y las serpientes son adquiridas por medios fraudulentos y la mayoría no se adaptan a vivir fuera de su hábitat natural, y otras se encuentran en peligro de extinción.
Cuando se adquiere una mascota bajo estas condiciones se están violando las leyes y se obliga a mantener un animal silvestre en condiciones de maltrato.
En cambio, la adopción resulta más humano y solidario ya que se trata de darle un hogar y cuidados a un animal abandonado ofreciéndole una segunda oportunidad. Muchos refugios de animales se encargan de vacunarlos, castrarlos y entregarlos en buen estado de salud, brindan información acerca de su temperamento y de otros detalles, con la finalidad de que la nueva familia conozca y sepa bien qué tipo de animal se está llevando.