Estudios realizados han comprobado que los gatos y las mujeres pueden llegar a ser íntimos amigos. Los mininos llegan a complementarse con sus dueñas y hasta parecen adquirir la misma personalidad, se vuelven cómplices y parecen recordar los favores para luego devolverlos. Es muy común ver a muchas mujeres que viven solas y que no tienen hijos, teniendo a un gato como mascota. Así como dicen que el perro es el mejor amigo del hombre, se ha comprobado que los mininos resultan ser íntimos de las féminas.
Pero esto no se dice solo por decir, especialistas europeos han realizados investigaciones donde se descubrió un vínculo especial que une a los gatos con las mujeres, y hasta se ha mencionado que estos felinos pueden influir en las decisiones y en el estado de ánimo de sus dueñas.
Durante las pruebas de personalidad realizadas de interrelación entre gatos y sus amos, se concluyó que entre los gatos y los humanos se involucran la atracción mutua, se facilita la interacción, la compatibilidad de personalidades, el juego, el afecto y hasta el apoyo social.
Los mininos son animales independientes y muy inteligentes, parece que recuerdan los favores para devolverlos después. Incluso copian la personalidad de sus dueñas y son muy parecidos a ellas en distintos aspectos, llegando hasta causar cierto tipo de influencia en ellas.
Pero, todo esto será positivo y agradable, si nos comportamos como verdaderas amas desde un comienzo, como tener la voluntad y el compromiso de hacernos cargo de este ser vivo hasta por 17 años, ya que algunos gatos pueden llegar hasta edad.
Si de verdad queremos a nuestra mascota los vínculos afectivos comienzan a generarse casi de inmediato, pero si algo pasa y estos llegan a romperse, será el animal quien sufra mucho más.
Debemos entenderlo, comprenderlo, engreírlo y darle mucho afecto.
Su espacio, cuidado, higiene y salud, son otros temas de mucho interés que deben brindarse desde el primer día.
Deben tener un lugar para ellos que debe estar siempre limpio, contar con una caja de arena, juguetes y otro espacio al aire libre donde pueda sentirse liberado.
En cuanto a su higiene no debemos descuidar su baño y su pelo, empleando productos especiales indicados para gatos. Las consultas y visitas al veterinario tampoco deben faltar y aunque a veces no visitamos al especialista con frecuencia, si debemos hacerlos cuando toquen las vacunas o notemos que algo no anda del todo bien.
Su alimentación debe ser balanceada ofreciéndole comida especial para mininos, sus comederos y bebederos deben estar siempre limpios, y tampoco debemos incluir en su dieta dulces o golosinas que le causen daños intestinales como chocolates, u otros productos como cebollas y ajos.