El cáncer en los perros se ha vuelto una enfermedad muy común que se presenta con síntomas muy parecidos al de los humanos. Existen diversos tipos siendo los más frecuentes el cácer en los huesos, en la piel y en los óganos genitales. El cáncer se ha convertido en una enfermedad común y cada día se conocen más personas y distintos casos con este mal. Pero la enfermedad también se ha presentado en animales, con signos y síntomas muy similares a los que puede padecer una persona.
Cuando nuestra mascota se enferma hacemos de todo para que pronto se recupere y siga tan sana y divertida como siempre. Pero con el paso de los años se vuelve más vulnerable y es más fácil que pueda contraer cualquier tipo de enfermedad.
En los perros el cáncer se origina justamente por la edad avanzada que pueda tener, y es que a medida que envejece, son mayores las posibilidades de contraerlo. Otra de las posibles causas puede ser que no se le haya esterilizado de forma adecuada.
En realidad la situación es muy parecida que la que se desata en los seres humanos, ya que también pueden encontrarse distintos tipos de cáncer, siendo los más comunes el osteosarcoma, es decir el cáncer a los huesos, que se pone de manifiesto sobre todo en perros de gran tamaño. También se presentan casos de cáncer de piel, que aparece en perros de mayor edad y es más fácil que aparezca en razas como los terriers, los bóxers y los mastines.
Se han visto canes con cáncer testicular, cáncer en las mamas, en el útero, en los ovarios; y algunos casos de linfosarcoma o cáncer en el sistema linfático. Este último actúa como defensa principal en contra de las enfermedades y cuando se ve afectado, las defensas de quien lo padece bajan demasiado, volviéndose más vulnerable a padecer cualquier tipo de enfermedad.
Según el diagnostico que tenga la mascota, se dará el tratamiento. Para conocer el tipo de cáncer que padece, se le debe hacer una serie de análisis como de orina y sangre, también biopsias, radiologías y citologías.
El resultado será la base para dar el mejo de los tratamientos que casi siempre incluye medicamentos, cirugía, radiación, quimioterapia, criocirugía para los tumores de menos tamaño, y hasta terapia fotodinámica que inyecta colorante a las células cancerígenas.
Algunos especialistas sugieren que para prevenir el cáncer mamario y testicular, lo mejor es esterilizarlos cuando son jóvenes. Las exposiciones al sol también deben de evitarse y no debemos de observar y papar las partes de su cuerpo, cada vez que lo acariciemos o le demos masajes.