Se dice mucho que ciertas razas de perros son muy agresivas y hasta peligrosas, como el Pitbull, el Rottweiler y el Dogo argentino. Pero en realidad, mucho tiene que ver la forma de crianza que les ofrecen los dueños para que lleguen a convertirse en animales muy temidos. 
A veces se relaciona algunas razas de perros con la agresividad, pero esto no tiene por qué ser del todo verdad ya que en la mayoría de los casos, se trata de una gran irresponsabilidad por parte de los dueños además de los medios de comunicación y su serie de comentarios y críticas que tachan a estas razas como altamente peligrosos.
Una raza bastante común dentro de la lista de perros peligrosos y agresivos es el Pitbull, pero no siempre ha sido así. La historia cuenta que hace más o menos 150 años tras, esta raza de canes se hacía cargo de los más pequeños de la casa, resultando ser excelentes niñeras.
Sin embargo, en la actualidad, se han convertido en uno de los perros más dañinos que puede existir. Esto tiene que ver mucho con los dueños, quienes olvidan enseñarle desde que son cachorros a socializar con las personas y con otros animales. Si vemos las cosas de una forma más general, entenderemos y con razón, que cualquier perro puede morder, así que el hecho de que el Pitbull tenga mandíbulas más fuertes no significa que sea más propenso a atacar, pero en caso que lo haga, su ataque sí sería letal.
Otras razas que también forman parte de este mito y que se ubican justo detrás del Pitbull son el Staffordshire Bull Terrier, el American Staffordshire Terrier, el Rottweiler, el Dogo argentino y muchas otras más que se han convertido, sin serlo, en animales dañinos para formar parte de un hogar y ser una cariñosa mascota.
No significa que cualquier perro dueño de un cuerpo robusto y con grandes músculos y que además por su raza tenga la cabeza ancha y el hocico achatado, tenga que ser necesariamente un asesino en potencia.
Además, se suma que a la mayoría de las razas antes mencionadas, les acompaña un pasado doloroso y con mucho sufrimiento, víctima de malos tratos y abandono, situaciones que en cualquier raza de perro, puede convertirlo en peligroso.
Por ello se hace muy necesario y hasta se convierte en una obligación, que la sociedad tome consciencia en cuanto al adiestramiento y entrenamiento de sus mascotas y que no se apure en señalar primero, sin antes conocer el origen del problema, que casi siempre, resultan ser los propios amos.
